El Perfil del Cliente. La Propuesta de Valor.
Visualizar de manera clara y sencilla los problemas y necesidades que queremos solucionar, así como nuestra respuesta a ellas.
De esta manera, podemos verificar que las ideas que hemos pensado como solución tienen sentido.
Si no coinciden las necesidades de nuestro cliente con lo que nuestra solución pretende ofrecer, necesitamos regresar a idear nuevas soluciones.
Si coinciden y se alinean adecuadamente, podemos pasar a probar nuestras ideas.